"Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús" (Fil. 2:5)
Cuando pensamos en Jesucristo lo primero que se nos viene a la mente son las palabras salvador, cordero, paz y amor, ¿y por qué es eso lo primero que se nos viene a la mente?, bueno a veces como seremos humanos y por naturaleza, tendemos a ser egoístas, y pensamos solo lo que Dios nos dio para entrar en su presencia, pero una vez que recibimos se nos olvida el sentir de Jesucristo, lo que el mostró y dio a conocer como ejemplo a seguir a todo aquel que quisiera ir en pos de ÉL y tomar su cruz.
Supongamos que una persona muy querida por te da un obsequio envuelto, le damos las gracias y su respectivo abrazo y muestras de agradecimiento, pero que pasa si nunca abrimos ese regalo, el sentir de la persona que te lo obsequió iba ahí en ese objeto, no por lo material sino por el detalle, Cristo es ese regalo, ese sentir que hubo en su persona, lo que el nos mandó a practicar y que se obtiene por medio del precioso poder del Espíritu Santo.
Desenvuelve ese regalo de Dios y disfruta de su bondad teniendo las cualidades que tuvo nuestro Señor, mientras caminó anunciando su evangelio. El sentir de Jesús fueron los que a continuación se mencionan examínate a ti mismo y medita si tienes el sentir de nuestro Señor Jesucristo.
Gozo: Mientras Jesús daba a conocer las buenas nuevas del evangelio su corazón se gozaba al ver a muchos judíos y no judíos creer en su palabra, así mismo cuando eran sanados y libertados. El mismo Jesús se gozo en el momento de la creación y vio que todas las cosas que Él había hecho eran buenas. ¡Te imaginas cuanta alegría y sintió el creador de los cielos y la tierra!
Humildad: Esto es lo que caracterizaba a nuestro Señor, la humildad, jamás se vanaglorio por las obras que hacía, porque sabía que la tarea que le encomendó el Padre fue la de servir. ¿Tienes un corazón humilde? ¿Tienes ese espíritu de servir sin ser recompensado? Que ejemplo nos dejó nuestro Señor en su caminar por el mundo el de la humildad.
Amor: Ahora pregúntate ¿tengo el amor que tuvo Jescucristo?. Ese amor del Señor de mostrar cariño, afecto, solidaridad, ternura y compasión por sus ovejas.
Sacrificio: El sacrificio de Jesús fue tan grande, tanto que dejo su trono en el cielo para venir a vivir este mundo, y no tener ni donde recostar su cabeza. ¿También tienes ese sacrificio de dejar las comodidades e ir a los lugares en donde sobreabunda la pobreza? Se necesita ese sacrificio de ir a los lugares mas lejanos y dar un mensaje de salvación al necesitado, despójate de tus comodidades y disponte en tu corazón hacer ese sacrificio.
Sinceridad: En la vida del Cristiano debe existir la sinceridad, no debe existir la mentira en su hablar, porque tiene que dar un buen testimonio. Se sincero en todo tu hablar, la sinceridad de Jesús se mostro en todo su caminar, nunca exclamó mentira al contrario siempre hablo de una forma tan sensata y segura que se maravillaban de Él.
Paciencia: El cristiano debe de tener mucha paciencia, llevar a cabo un ministerio o una misión requiere de mucha paciencia por los lugares o las situaciones a donde te lleve el Señor, así como el lo tuvo con los cientos y miles de enfermos que le llevaron, siempre tuvo la paciencia para que ellos recibieran su milagro.
Fortaleza: Para seguir a Jesucristo se necesita de mucha fortaleza para no caer en desánimo y enfrentarse al mundo espiritual y salir victoriosos como los hizo Jesús en la cruz, cuando se encontraba en agonía en el monte del Getsemaní le pidió fortalezas al padre y que se hiciera su voluntad y no la de Él, así estamos también destinados a hacer la voluntad de nuestro señor, y tener fortaleza para cumplirla.
Misericordia: La misericordia de Jesús que tuvo por los enfermos, por los perdidos, por las adulteras, por los sordos, por los ciegos fue tan maravillosa, que no hay nadie en el mundo que lo iguale en ese sentido, el es único, pero si puedes imitarlo y ser como Él, su vaso útil.
Servir: ¿Estas dispuesto a servir como lo hizo Jesús y no recibir nada a cambio, ni riquezas, ni gloria por anunciar su palabra? Jesús nunca espero nada a cambio el vino a servir y no a ser servido. Lc 22:24-27
Esto nos lleva a una reflexión que Cristo siendo Dios, se despojo a si mismo de su gloria, para enseñarnos como vivir y obtener la paz dentro de tu corazón, el siendo Dios se humilló así mismo, que gran sacrificio de Él, hoy puedes decir ¿quien habría hecho todo eso por mi? Acaso un rey de la tierra deja su poder y gloria terrenal para servir a su pueblo? No busques mas solo hubo una persona, que vino a servir a los demás, el mismo dijo que no venía para ser servido sino para servir, si tienes el regalo de Dios a Cristo en tu corazón, ve y se un siervo en el nombre de Jesús, y deja que tu vida se llene del sentir de Jesucristo por medio del Espíritu Santo. Dios les bendiga.
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